La narrativa se sumerge en un cosmos lleno de sorpresas donde el cariño y el peligro se entrelazan con absoluta naturalidad. Rebeca se embarca en una travesía que reta lo diario, exponiendo resoluciones firmes y instantes inopinados. Casi una novela luce por su mezcla de humor, pasión y ocasiones que sostienen al lector en desequilibrio.