La historia se lleva a cabo mediante pistas oscuras y revelaciones espectaculares que capturan al lector desde el primer momento. A lo largo de la investigación, La Virgen de la peregrina surge como el símbolo central que reta a la comisaria Rocío Castelo a desentrañar misterios extensamente ocultos, sumergiéndola en un planeta de intrigas y tensión creciente.